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Opinión. López Obrador: crece el autoritarismo y sed de venganza

por Agencia Zona Roja

Ismael García M./Zona Roja.

Oaxaca de Juárez, Oax., a 22 de mayo de 2023.- A punto de cerrar el sexenio de la autollamada “Cuarta Transformación”, el rostro de Andrés Manuel López Obrador se torna en preocupación y deviene en actitudes de autoritarismo, venganza y odio.

Según él, los enemigos con los que pelea son los “conservadores” y “fifís”, además de los periodistas que revelan corrupción en su gobierno, pero es la necia realidad la que sigue rebelde: 

Extrema violencia, probable protección a grupos delictivos, instituciones desmanteladas, ataques al Poder Judicial y a todo aquel que se oponga a sus designios; graves hechos de corrupción, en que podrían estar involucrados sus hijos; sumisión al Ejército Mexicano; megaproyectos sin transparencia, con excesivas inversiones y que podrían quedar inconclusos.

En este espacio, desde hace varias semanas se anticipó el fin del sexenio, principalmente porque el Presidente adelantó su sucesión y juega con sus candidatos, pese a que ya se decidió por una: Claudia Sheinbaum.

Ello ha generado una crisis política interna que tiene también al Partido Morena maniatado a las órdenes de Obrador. Hoy los espacios de discusión pública no son las obras o acciones positivas del mandatario mexicano, sino la encarnizada lucha por la sucesión.

Y tan preocupado está el jefe político y único de los morenistas, que ha arreciado sus críticas y odios en contra de todo y de todos, así sean instituciones como el Poder Judicial, el Instituto Nacional Electoral o el Tribunal Electoral del Poder Judicial… mientras protege a quienes han saqueado desde su gobierno.

SUCESIÓN ADELANTADA

Su necedad porque sea Claudia Sheinbaum la candidata presidencial de Morena y de otros partidos ha dividido al partido y a los propios integrantes de su gabinete.

Día con día se ve la cargada, pública y descaradamente, a favor de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, en prácticamente todo el territorio nacional. 

Hasta los gobernadores se han inmiscuido en este juego electoral, violatorio de las leyes pero sobre todo violatorio de las supuestas normas morenistas.

Sucedió en Oaxaca hace apenas una semana, en que el mandatario Salomón Jara Cruz optó por acompañar a Sheinbaum a dos conferencias durante un día, una en Juchitán y otra en Huatulco, con todos los integrantes del gabinete y toda la cargada de organizaciones sociales.

Mientras que Marcelo Ebrard estuvo tres días, dos de ellos en actos oficiales pero acomodados al proselitismo, y ni siquiera tuvo una palabra de recibimiento y mucho menos envió representantes oficiales.

Eso ha generado enojos del propio secretario de Relaciones Exteriores, único opositor con posibilidades reales de lograr la candidatura… si lo dejan y si el juego morenista es limpio.

Pero no. Ebrard aún no acepta el cargo que le ofrece López Obrador en el próximo gabinete.

Adán Augusto López es sólo un marioneta del Presidente, pues ni ata ni desata en la Secretaría de Gobernación, pero se pasea también por el país, a sabiendas que no tiene ninguna posibilidad de suceder a su actual jefe.

Ricardo Monreal, siempre dispuesto a cualquier genuflexión y a obedecer órdenes, ya aceptó que no podrá ser candidato. Así ha actuado el senador en el priismo y en el perredismo, amagar y amagar y amagar, hasta lograr un beneficio y el de ahora es la posible candidatura a la Ciudad de México.

¿Mario Delgado? Otro títere del Presidente que se limita a observar el rejuego electoral. Por cierto, Obrador ya negoció ganar el Estado de México y ceder el estado de Coahuila, en la disputa por la gubernatura, este año.

CONTRA INSTITUCIONES

Andrés Manuel no puede convivir con la democracia ni la tolera, pese a sus discursos en público. 

Sus más recientes pleitos son con la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que le ha ganado ya varias partidas, habida cuenta que no se ciñe a sus órdenes.

Y como no obedece, la presidenta de esa institución, Norma Piña, ha sido víctima de una andanada de ataques que hasta ha sido apoyada por mandatarios, como sucedió la semana pasada con la participación del veracruzano Cuitláhuac García.

El máximo órgano de justicia determinó que no es viable ocultar los datos de las megaobras presidenciales; Obrador respondió con otro decreto.

Decidió echar abajo el llamado “Plan B”, que implica diversos cambios en el Instituto Nacional Electoral; el mandatario decidió arreciar sus críticas, desde el púlpito de las “mañaneras”.

Con el Instituto Nacional Electoral, se ha topado con pared y ha logrado mínimos cambios, todo porque han criticado también los excesos proselitistas del mandatario morenista. Igual ha hecho con el Tribunal Electoral del Poder Judicial.

Para él, todos son corruptos, ministros y magistrados, y nadie tiene la verdad más que él. Y si no gana, impone.

Como sucedió en el INE, en que logró colocar a Guadalupe Taddei, que ahora cumple toda clase de caprichos, como se decidió recientemente de no sancionar a las “corcholatas” que hacen campaña proselitista todos los días. 

LOS MEGAPROYECTOS

El Presidente está decidido a pasar a la historia con megaproyectos, que han succionado todo, todo el presupuesto federal —junto con el dinero que regala a través de programas sociales— y ha originado con ello desmantelamiento de programas e incluso la reducción de medicamentos para la población desprotegida como es la niñez.

Eso no importa si lo que vale es tener un Tren Maya que comunique a diversas entidades del país, así sea con costos elevadísimos y pasando por encima de vestigios prehispánicos y de los recursos naturales. Está en duda, por cierto, que sea concluido en el plazo fijado.

La refinería Dos Bocas, en Tabasco, también ha requerido de multimillonarias inversiones y supuestamente ya se inauguró, pero no produce una gota de combustibles.

El Corredor Interoceánico, sigue siendo una quimera y los trabajos, que involucran a Oaxaca y a Veracruz, están muy retrasados, tanto que quizá no se terminen en el sexenio.

A previsión de ello, la semana pasada López Obrador se apropió o expropió, de 120 kilómetros de vías férreas en territorio veracruzano, que son del Grupo México, para ocuparlos para el Tren Transístimico.

Los conflictos y oposiciones en Oaxaca no paran y las autoridades estatales poco o nada han hecho para garantizar seguridad para esas inversiones y la concreción del proyecto.

Ahí está otro “elefante blanco”, el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles”, que a un año de haber sido inaugurado, tiene una mínima actividad de transporte aéreo.

¿Y LA CORRUPCIÓN?

Sí la hay en la “Cuarta Transformación” y el caso más claro es en Segalmex, en donde “desaparecieron” cientos de millones de pesos, pero se detuvieron a funcionarios de menor envergadura y el director general sigue libre e incluso protegido en otro cargo público.

Ahí está el caso del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, donde paradójicamente han robado dinero y bienes.

Ahí está el lujoso departamento que adquirió el general secretario de la Defensa Nacional, que ha reconocido la propiedad, aunque minimiza el costo.

Ahí están los hijos, Andrés Manuel y José Ramón —hijos de la finada Rocío Beltrán—, hoy prósperos empresarios, que viajan continuamente al extranjero y que han sido descubiertos como los verdaderos negociantes de la obra pública presidencial.

Ahí está el “dinosaurio” de Manuel Bartlett Díaz, que también ha sido descubierto con múltiples propiedades particulares.

Por cierto, en temas de corrupción, está también la protección del director del Instituto Nacional de Migración, probable responsable de la muerte de 40 migrantes, calcinados en sede oficial, pero sigue en el cargo y hasta “duerme bien”.

Mientras tanto, la guerra intestina entre las “corcholatas” sigue y Obrador sólo atina a utilizar su poder y su autoritarismo. Señala a quienes acusan las fallas en su gobierno, así sean periodistas, y hasta los acusa de delincuentes, aún sin juicio formal de por medio.

Mientras tanto, crece el poder del Ejército Mexicano, otorgado por el propio mandatario, y ya se siente suficiente para incidir en la sucesión presidencial, así sea por la fuerza. 

Mientras tanto, el crimen organizado se apodera día con día de más regiones del país…

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